Alrededor de cuatro mil aficionados del Real Zaragoza se han volcado hoy con su equipo en el entrenamiento a puerta abierta para insuflarle ánimo para el importante partido que le enfrentará en el estadio de Baladios de Vigo al Celta.
El entrenador Manolo Jiménez, más de dos meses después de encerrarse a cal y canto con sus hombres para trabajar lejos de los focos, decidió dar la oportunidad a los seguidores zaragocistas para mostrar su apoyo y hacer una sesión con acceso libre.
El equipo aragonés afrontará casi en solitario el trascendental encuentro de la lucha por la permanencia en tierras viguesas, por lo que el ánimo dado por sus seguidores antes de viajar a Vigo debe suponer al menos un empujón para mejorar su maltrecha moral después de catorce jornadas consecutivas sin conocer la victoria.
Con varios partidillos a medio campo y los habituales estiramientos como conclusión ha resuelto el técnico sevillano una sesión de trabajo que ha durado menos de una hora.
La sesión concluyó con todos los componentes de la plantilla zaragocista aplaudiendo a sus seguidores en lo que confían pueda ser el preludio del reencuentro con una victoria que en 2013 todavía no conocen.
Fuente: El periódico de Aragón
